Por qué el usuario debe tener control sobre sus datos

Blockchain y la autogobernanza del dato a través de biometría

La transformación digital, los escándalos de privacidad y las violaciones de seguridad masivas hacen urgente una revisión de los sistemas de almacenamiento de nuestros datos. Porque, además, estos son cada vez más sensible. Toda nuestra información está en internet, cuentas bancarias, tarjetas de crédito, direcciones, contraseñas… pero no sabemos en manos de quién, lo que nos deja en una situación de vulnerabilidad constante. Por eso debemos recurrir a modelos de almacenamiento que respeten nuestra privacidad y protejan nuestra identidad digital. 

 

¿Qué es la tecnología blockchain? 

La tecnología blockchain no es solo una base de datos, sino un conjunto de tecnologías que permiten la transferencia de un valor o activo de un lugar a otro sin intervención de terceros. 

La cantidad de transacciones ha crecido exponencialmente. Esto ralentiza el negocio y perjudica los resultados. Necesitamos mejorar nuestra manera de hacer las cosas. Y es aquí donde interviene el blockchain

Un blockchain está compuesto de “bloques”, los cuales se agregan continuamente a la cadena. Estos bloques pueden considerarse páginas permanentes en un archivo donde se almacenan datos sobre la red. Una vez que se escribe la información, o se agrega el bloque, no se puede cambiar sin el consenso de los nodos que se ejecutan en esa red. ¿Pero cómo utilizarlo para asegurar nuestra identidad digital? 

 

El modelo Self Sovereign Identity 

La aplicación de este modelo pretende  devolver a las personas el control y la responsabilidad sobre su propia identidad digital. La autogobernanza del dato o Self-Sovereign Identity  tiene la capacidad de ayudar al usuario final a tener un control más preciso sobre la información personal, qué comparte, en qué contexto y con quién. 

Ahora mismo tenemos cientos de cuentas en internet, pero ninguna nos representa al 100% y ni siquiera están bajo nuestro control. Esas cuentas son propiedad del proveedor, lo que nos permite utilizar el servicio como usuarios, a cambio de los datos y la información que proporcionamos. Con el modelo SSI no son las grandes corporaciones, ni los gobiernos quienes recogen, almacenan y procesan los datos, y por tanto no existe esa jerarquía. Y la verificación, a través de la biometría, resulta en la consecución de una identidad digital veraz, segura y sobre todo privada. 

 

¿Qué problemas resuelve la combinación de ambos? 

La tecnología blockchain es la pieza que falta para que la identidad autosuficiente sea una realidad. En el contexto de la SSI, la tecnología blockchain resuelve varios problemas que han afectado al mundo de las identidades digitales hasta el día de hoy. 

El intermediario: elimina la necesidad de un mediador, que generalmente está representado por un banco. Podemos confirmar transacciones e identidades, así como verificar contratos, y todo ello sin la necesidad de un tercero. 

Problemas de confianza: la red nos procura confianza a través de una combinación, de un complejo problema matemático que debe ser resuelto, probado y luego verificado por el resto de la red, antes de que se pueda agregar cualquier nueva información.  

Transparencia: en blockchains públicos, todas las transacciones están disponibles para su visualización, esto permite un nivel de integridad y responsabilidad, que no ha existido antes en sistemas financieros anteriores. 

Control: el usuario es el propietario de sus propios datos, teniendo el control sobre la trazabilidad de los mismos cumpliendo con el RGPD.