Biometría y criptomonedas: la clave para mejorar la seguridad

crypto y biometria

Las criptomonedas son divisas digitales que utilizan métodos de criptografía para asegurar las transacciones. Se utilizan en un sistema descentralizado mediante la tecnología blockchain, donde cada agente de la red garantiza la seguridad y el equilibrio de las operaciones, muy alejado del modelo de los bancos centrales tradicionales. 

De este modo, las criptomonedas eliminan el papel del intermediario en todas las transacciones, acelerando cada proceso dentro de una red en la que todos los usuarios velan por su buen funcionamiento. El uso de la tecnología blockchain permite almacenar de forma segura los datos compartidos de las operaciones, de tal forma que todos los participantes puedan rastrear cada paso.   

 

La seguridad de las criptomonedas, pros y contras 

Los protocolos de consenso establecidos por los usuarios de las redes blockchain definen la velocidad, el tamaño y la seguridad de los sistemas de cada crypto, lo que deja más o menos margen para la manipulación y hackeo de terceros. Las redes más pequeñas son las más expuestas a sufrir estos ataques, cada vez más perfeccionados, y de alcance supranacional.  

El acceso a las carteras de criptomonedas se ha controlado y gestionado tradicionalmente mediante contraseñas y otras credenciales basadas en el conocimiento. Sin embargo, las cada vez más frecuentes estafas de suplantación de identidad realizadas a través de sofisticadas técnicas, como el uso de “malwares”, han demostrado la inoperatividad de estos métodos. 

Según un informe elaborado por De.Fi, los tres primeros meses de 2023 se alcanzó un total de 372 M$ por estafas y exploits en el mercado crypto,  grandes pérdidas económicas que urgen una pronta solución. 

 

Reconocimiento biométrico, la alternativa más eficaz 

Los métodos biométricos de verificación de identidad digital han demostrado ser la mejor alternativa para evitar estos ataques. La sustitución de las tradicionales contraseñas como métodos de acceso a las cuentas por el patrón biométrico obtenido del rostro del usuario, único e intransferible, se convierte en la mejor garantía de protección de las carteras de criptomonedas.  

La autenticación de dos factores en la que se basan estos procedimientos refuerza la seguridad del proceso de verificación de identidad. La pertenencia de la cuenta queda blindada gracias al proceso, basado en dos sencillos pasos: el escaneo de los datos del documento de identidad del usuario y la verificación de su fotografía con el selfie que realiza el usuario. El uso de la tecnología Deep Learning, donde se aplican los últimos avances en IA como las técnicas de liveness pasivo, garantiza la seguridad del procedimiento.  

De este modo, las carteras de criptomonedas quedan a salvo de los intentos de fraude a través de la suplantación de identidad, proporcionando la máxima operatividad a los usuarios de las crypto.